domingo, 29 de julio de 2012

Si se puede.

Hace unos días una buena amiga se quejaba de que en su vida no había equilibrio. Yo le sugerí que el equilibrio lo tendrá si ella lo busca. Se sintió ofendida alegando que no dependía de ella, sino de su situación. La escuché, y solo escuché justificaciones para seguir como está. Yo respeto su punto de vista, pero creo que la vida no es así.

Cada uno de nosotros decide cuales son nuestras prioridades en la vida, y como queremos vivir.

No podemos dejarnos llevar constantemente por la inercia, hay momentos en que debemos hacer un alto, una pausa. Calmarnos y mirar alrededor como son las cosas en realidad, y no como queremos que sean.

Es muy importante que tengamos claro el objetivo que perseguimos. Esto nos permitirá centrarnos en lo importante y evitaremos caer en un torbellino de actividades que a menudo no nos llevan a ninguna parte de forma efectiva.

Tendremos que ver cuáles son los elementos en nuestra vida que ejercen de ladrones del tiempo, y limitarlos. El tiempo es uno de esos tesoros que nunca podremos recuperar. Si queremos vivir en equilibrio no debemos menospreciar este preciado bien. 


Y aunque es sencillo de decir esto requiere de una gran fuerza de voluntad. Es más fácil quejarnos que responsabilizarnos de nuestra situación, que conocernos mejor y definir nuestro objetivo. 

Hay que ser conscientes de uno mismo. Cuales son nuestras virtudes y nuestras limitaciones, pues a la larga estas limitaciones pueden ser verdaderas ventajas para nosotros mismos.

Una persona puede cambiarse a sí misma, y dominar su propio destino.

En nuestras manos está el poder mejorar y la meditación es una excelente herramienta. Nos ayuda aprender a utilizar las emociones para pensar y no a pensar con las emociones. Frecuentemente olvidamos que uno de nuestros privilegios es el decidir lo que pensamos.

No hay que permitir que el miedo a ser diferente nos impida buscar nuevas formas de resolver los retos o problemas. Si sabemos quienes somos y cuales son nuestras metas y objetivos veremos que necesitaremos hacer las cosas de un modo diferente a los demás para encontrar ese punto de equilibrio en nuestra vida.

Un punto que será diferente para cada uno de nosotros.

Tenemos que vivir nuestra propia vida y dominar nuestro destino.





lunes, 23 de julio de 2012

Gestionando el tiempo.

No nos engañemos, vivir de modo equilibrado, no es una tarea fácil, y exige de nosotros un esfuerzo, para evitar caer en las inercias del día a día.

Por ello me he creado 3 listas con los objetivos más importantes para las 3 zonas de mi vida; digamos una lista para cada una de las pistas: La Profesional, La Personal, y La Familiar.

También hay una lista con otros proyectos que no son tan relevantes para cada una de las pistas, pero que me interesan, de tal modo que pueda ir alternando las actividades relevantes de una "pista" con dos más "ligeras" de las otras dos pistas. Y así no termino desgastada.



Por otro lado, desde que me explicaron la Teoría del Pomodoro. Intento organizarme aplicándola a mi día a día.

Esta técnica se basa en concentrarse en una tarea durante 25 minutos, posteriormente tomarme 5 minutos de descanso, en los siguientes 25 minutos cambio de tarea o regreso a la misma, y luego 5 de descanso. A cada 25 minutos se le denomina pomodoro, y cada 4 pomodoros el descanso es de 15 minutos.

El nombre de la técnica se le ha dado en honor a los relojes de cocina, siendo el de forma de tomate (Pomodoro) uno de gran éxito en Italia.

Lo importante es que los pomodoros los organicemos pensando en nuestros objetivos en cada una de las áreas de nuestra vida.

El hacer estos ejercicios a mi me ayuda a ir menos estresada, y a sentirme más satisfecha pues aprovecho mejor el día. Espero que compartiendo esta información a alguien más le pueda ayudar.



martes, 10 de julio de 2012

Planificar está muy bien, pero hay que actuar y no olvidar nuestra misión

Diariamente hago un plan, aunque sea de modo mental, de lo que haré o pretendo hacer el día de mañana. Es una conducta que me recomendó una persona que me quiere mucho: Hay que hacer listas, planificar. Y la verdad es que me sirve mucho.

La planificación del día siguiente, del plan personal, del plan de negocio, de lo que queramos ES MUY IMPORTANTE. Por que si no meditamos a donde queremos ir, cual son nuestras posibilidades, herramientas, y caminos, simplemente iremos dando tumbos por la vida.

La segunda parte también es importante y es cuando llega el momento, sé que debo de actuar. Si no lo hago al final de nada sirven las listas, ni los sueños, ni mi objetivo. DEBO ACTUAR.

Para que funcionemos de manera eficiente y al final tengamos una vida en equilibrio debemos de pensar:

                             Misión + Visión + Acción

Y ahora un reto interesante: Has un listado de los principales valores en tu vida,  e intentar basar tus relaciones personales, y laborales en ellos.

Muchas veces tenemos un corto circuito, estrés excesivo, nos enfermamos constantemente, o tenemos otros síntomas similares porque no estamos actuando conforme a nuestros valores.

Con tu listado de valores en la mano, podrás comenzar a establecer tu Misión.

Y ahora, vamos por ese equilibrio.

domingo, 8 de julio de 2012

De aquí a 5 años

Imaginarnos cómo seremos y estaremos en el futuro por ejemplo en unos cinco años, es un ejercicio que deberíamos hacer para ver realmente cómo queremos estar y ser. Con este ejercicio podremos definir nuestro objetivo definivo. Nuestra misión. Y por supuesto debemos planificar y actuar para llegar ahí. No nos debemos olvidar que hay que actuar. Que en el camino cometeremos errores, pero que la persistencia siempre vence al fracaso. Como los niños, cuando se caen al aprender a caminar, ¿qué hacen? se levantan y miran hacia adelante y aprenden.

Recupera a ese niño tuyo con avidez de aprender, crecer y lograr sus metas.

Cuando ya hemos establecido nuestro objetivo, nuestro ideal de nosotros mismos en el futuro, no hay que olvidar algo importante, y es que seremos nosotros los que realmente tenemos el poder de que suceda, y que seremos las mismas personas de aquí a 5 años excepto por la gente que hayamos conocido y los libros que hayamos leído.

Piensa con quien pasas mucho tiempo, qué te aporta esa relación, y si hay alguien que puede aportarte aprendizaje y quieres pasar tiempo con esa persona.

La vida es corta, disfrútala, y aprovéchala.